Ayer disputamos la prueba de Media Maratón del Bilbao Nigth Marathon, una carrera con pretensiones que no da la talla.
El que era nuestro último entrenamiento serio antes del Maratón de Nueva York, tuvo un comienzo caótico. El diseño del recorrido tuvo que ser preparado por alguien sin ninguna experiencia, porque pretender meter a 6.500 personas por una acera estrecha, con bancos y otros obstáculos, es de necios o de locos. Al margen de las caídas y los golpes, que los hubo, darle a esta carrera el halo de gran prueba nacional a lo Behobia-San Sebastian o MAPOMA, con los primeros 4 kilómetros que tiene, es como mínimo una broma. Y no sólo eso, la carrera va mucho rato metida porque carriles bici, con mala delimitación de idas y vueltas, por aceras... como queriendo no estorbar en Bilbao. Una carrera que quiere ser seña de identidad de una ciudad, no se arrincona así. Mucho marketing y poca carrera.
Bueno, ya me he quedado a gusto. Como entreno del Maratón, sensaciones contradictorias. Lo primero es que hacía bastante calor (20 grados por la noche y con humedad). La consecuencia es que iba con el freno de mano puesto por si acaso. Total que me guardaba para progresar al final y al final progresé, pero hacia atrás. No me hidraté bien (vasos muy pequeños y encajados en bandejas) y al final me costó bastante.
El resto de la expedición tuvo rendimiento desigual. Mikel 1h26m y está que se sale. Asier 1h39m con bastante sufrimiento. Yo 1h43m 18 segundos por delante de Leire con 1h44m que no me dio caña porque no quiso...
Última salida larga y hoy lunes ¡¡¡ya sólo quedan 13 días!!!
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No fuiste el último que acabó calentito esta publicitada carrera nocturna. Aprovecho este foro para liberar toxinas. Coincido plenamente en todo lo que dices, y creo que te quedas corto. He leído por ahí comentarios entusiastas, que si magnífica organización, que si una ciudad volcada... No sé yo, no sé yo. La gestión de la masificación fue pésima, tanto en la salida como en el tramo inicial (muelles y calleja mal iluminados, con firme pocho-pocho y encima sin separación de garantías con los galgos que volvían lanzados en sentido contrario) como a la hora de incorporar la Carrera Pirata, o en el tramo que bajaba hacia el IMQ, ya en la otra ribera, y donde te hacían correr por el estrecho sendero del parque. No me parece que la prueba tenga motivos para sacar pecho (más bien para sonrojarse), ni por supuesto que haga honor a la ciudad. Aunque, conociendo un poco lo que se cuece por Bilbao en materia atlética (durante años, lo del maratón diurno de mayo ha sido kafkiano), tampoco me extraña tanto. En general, me parece una falta de respeto a los corredores, porque en determinadas situaciones se les trata como ganado-mercancía. Para algunas (des)organizaciones, el éxito se mide en términos recaudatorios y de número de participantes (cuantos más, mejor: al mogollón y allá películas). Si nos atenemos exclusivamente a eso, un diez para el Night Marathon. Haciendo memoria, salvo alguna humilde y voluntariosa prueba "de pueblo" posiblemente sea lo peorcito que he corrido nunca.
ResponderEliminarDebió ser un desastre, todos lo decís, les va costar lavarle la cara. Suerte en NY y mucha envidia
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